Sobre Javea

Muchos de los que terminan decidiendo mudarse a Javea lo hacen tras quedarse encantados con la ciudad después de haber presenciado un día de fiesta. Situado aproximadamente a una hora y cuarto en auto desde los aeropuertos de Valencia y Alicante, es un lugar conveniente y accesible para hacer escapadas y vacaciones, además de estar bien situado para los residentes que quieran hacer una visita rápida a casa.

Uno de los aspectos de Javea que realmente “capta” a la gente es el paisaje, con sus exuberantes mares azules y suntuosas colinas y valles. Una vez estando en la ciudad se hace evidente encontrar un auténtico sabor de la España clásica. Tampoco ha sido afectada por el duro desarrollo de otros lugares del Mediterráneo, por lo que Javea mantiene su impresionante arquitectura que hace sentir como en casa en medio de su belleza natural.

Con un antiguo puerto pesquero ahora parcialmente convertido en un náutico, hay algo para todo el mundo que elije vivir o visitar Javea. Aquellos que se sientan energéticos y ansiosos de diversión pueden disfrutar del mar, incluyendo las vivas playa, y un montón tiendas y restaurantes excelentes. Si pasea por el casco antiguo sentirá el encanto de las calles estrechas y las plazas que llenan vida a la atmósfera.

Los afortunados que pueden mudarse a Javea a largo plazo y que tengan hijos también pueden estar seguros de que las escuelas locales son excelentes, y un montón de ellas ofrecen un plan de estudios completo con inglés incluido. También el sistema de salud español es uno de los mejores de Europa y es de muy fácil acceso para los expatriados.

Se calcula que Javea cuenta con más de 320 días de sol radiante cada año, intercalado con aguaceros ocasionales que ayudan a mantener su exquisito paisaje. Hay tanto para hacer en la ciudad, ya que el terreno se presta para hacer paseos tranquilos por las colinas o a lo largo de la costa, y por supuesto, ¡no hay mejor mar en el Mediterráneo en él se pueda tomar un chapuzón!